Cinco canciones para conocer AC/DC

Formados en Sídney, Australia, en 1973, por los hermanos Angus y Malcolm Young, AC/DC se convirtieron en los reyes del hard rock gracias a su mezcla explosiva de riffs de guitarra sencillos pero demoledores, un ritmo arrollador y letras cargadas de humor, picardía y rebeldía.

Su música, directa y sin adornos, se convirtió en la banda sonora de millones de jóvenes en todo el mundo. Angus Young, con su uniforme escolar y su inconfundible estilo en la guitarra, es el símbolo del grupo, mientras que la voz desgarrada primero de Bon Scott (hasta su muerte en 1980) y luego de Brian Johnson dio carácter a un sonido que nunca dejó de ser puro rock eléctrico.


A lo largo de los años, AC/DC demostraron ser una máquina de rock en vivo, con conciertos apoteósicos y una fidelidad a su estilo que los convirtió en una de las bandas más exitosas y queridas de todos los tiempos.


Highway to Hell

El último gran himno de la era Bon Scott. Con su riff inmortal y estribillo demoledor, se convirtió en una de las canciones más reconocibles de la historia del rock.


Back in Black

El tema que marcó el renacer de AC/DC tras la muerte de Bon Scott. Con Brian Johnson al micrófono, esta canción es puro poder y uno de los riffs más icónicos de todos los tiempos.


You Shook Me All Night Long

Un clásico del hard rock con un tono más festivo y seductor. Es de las canciones más accesibles y coreadas de su repertorio.


Thunderstruck

Quizás el riff más famoso de Angus Young. Un estallido de energía que mantuvo a AC/DC en la cima en los 90 y sigue siendo un imprescindible en sus conciertos.


T.N.T.

Un grito puro de rebeldía juvenil, con un estribillo que se convirtió en himno para varias generaciones. Representa el lado más crudo y salvaje de sus inicios.

Cinco canciones para conocer a Paul Anka

En los años 50, cuando el rock & roll empezaba a arrasar, apareció un joven canadiense con una sonrisa encantadora y un talento natural para las melodías: Paul Anka. Con apenas 15 años ya estaba en las listas de éxitos y muy pronto se convirtió en un fenómeno internacional.

Pero su historia no se quedó en la de un ídolo juvenil pasajero. A lo largo de las décadas, Paul Anka demostró que era un compositor de altura, capaz de escribir canciones para otros artistas (entre ellas la legendaria “My Way”, que Frank Sinatra convirtió en himno universal, o temas de Tom Jones y Michael Jackson) y de reinventarse en diferentes estilos.

Su música mezcla romanticismo, elegancia y una sensibilidad melódica que lo convirtió en uno de los grandes crooners del pop.


Diana

El gran debut que lo lanzó a la fama mundial. Con apenas 15 años, Paul escribió esta canción dedicada a una amiga mayor. Se convirtió en uno de los singles más vendidos de los 50 y lo catapultó como ídolo juvenil.


Put Your Head on My Shoulder

Una balada tierna y romántica que definió su estilo dulce y elegante. Es una de sus canciones más perdurables y sigue sonando en películas y series.


Lonely Boy

Otro de sus grandes clásicos juveniles. Refleja tanto la melancolía adolescente como el estilo pop-orquestal que lo distinguía de otros rockeros de su época.


Times of your life

Un himno nostálgico, inicialmente compuesto para un anuncio publicitario, que se convirtió en uno de sus grandes éxitos de los 70. Refleja la madurez de Anka y su capacidad para emocionar a un público adulto.


(You’re) Having My Baby

Su gran regreso en los 70. Tras años sin grandes éxitos en listas fue número 1 en Billboard y consolidó a un artista que podía seguir siendo relevante más allá de su etapa juvenil.


Cinco canciones para conocer a Miles Davis

Hablar de Miles Davis es hablar de la historia misma del jazz en el siglo XX. No solo fue un trompetista virtuoso, sino un visionario que cambió el rumbo del género en varias ocasiones: bebop, cool jazz, hard bop, modal jazz y jazz fusión. Donde había un movimiento nuevo, allí estaba Miles, empujando fronteras y abriendo caminos.

Su estilo como trompetista era inconfundible: economía de notas, sonido aterciopelado y pausas cargadas de intención. Pero más allá de lo técnico, su grandeza estuvo en su capacidad de reinventarse y rodearse de los mejores músicos: John Coltrane, Herbie Hancock, Wayne Shorter, Tony Williams, Chick Corea… todos pasaron por sus bandas y absorbieron su influencia.

Era un hombre complejo: enigmático, desafiante, a veces distante. Pero esa intensidad se tradujo en música que todavía hoy suena fresca, arriesgada y profundamente emocional.


So What

El ejemplo perfecto del jazz modal: simple en apariencia, infinito en posibilidades. El contrabajo de Paul Chambers abre el camino, y Miles, con su trompeta, crea magia con pocas notas. Es la puerta de entrada al jazz moderno.


Freddie Freeloader

Un blues relajado y elegante, donde Miles y John Coltrane brillan en diálogo. Representa esa capacidad suya de hacer algo clásico y fresco al mismo tiempo.


Round Midnight

Su interpretación del estándar de Thelonious Monk fue un punto de inflexión en su carrera, mostrando su madurez y consolidándolo como líder de banda.


Bitches Brew

Un antes y un después en el jazz: eléctrico, caótico, expansivo. Aquí nació la jazz fusión, influenciando tanto a Weather Report como a bandas de rock progresivo y funk. Una obra maestra de ruptura.


Tutu

De sus últimas etapas, una colaboración con Marcus Miller que mezcla jazz con sintetizadores y funk ochentero. Demuestra que Miles nunca dejó de experimentar, incluso en sus últimos años.

Cinco canciones para conocer a Art Garfunkel

Tras la ruptura de Simon & Garfunkel en 1970, Art Garfunkel decidió iniciar una carrera en solitario marcada por su voz cristalina y etérea, una de las más reconocibles de la música popular. A diferencia de Paul Simon, que se volcó en la composición y la experimentación, Garfunkel se centró en la interpretación vocal y en dar vida a canciones escritas por otros compositores.

Su música en solitario tiende hacia las baladas románticas, arreglos orquestales y un tono más melódico y suave, muchas veces con un aire de pop adulto contemporáneo. Además de la música, Garfunkel desarrolló una carrera como actor, y siempre cultivó una personalidad más introspectiva, alejada del foco mediático.

Aunque no alcanzó el éxito masivo de Paul Simon, dejó canciones entrañables y construyó un legado como intérprete sensible y sofisticado.


All I Know

Su primer gran éxito en solitario, escrito por Jimmy Webb. Una balada delicada y nostálgica donde su voz transmite una vulnerabilidad única.


I Only Have Eyes for You

Una de sus interpretaciones más reconocidas: versión del clásico de los Flamingos. Se convirtió en un éxito internacional y muestra su capacidad para reinventar canciones ajenas con su sello vocal.


Breakaway

Canción que da nombre a su disco más exitoso. Ligera, melódica y elegante, con ese aire sofisticado que caracterizó su etapa de los 70.


Crying in the Rain

Un dúo junto a James Taylor que rescata la esencia melódica de Garfunkel. Muestra cómo su voz seguía siendo capaz de transmitir calidez incluso décadas después de sus inicios.


Bright Eyes

Tema melancólico y emotivo, escrito por Mike Batt para la película Watership Down. Fue un éxito en Reino Unido y se convirtió en una de sus canciones más recordadas.

Cinco canciones para conocer a Paul Simon

Después de la separación de Simon & Garfunkel en 1970, muchos pensaron que Paul Simon se diluiría sin su compañero vocal Art. Sin embargo, Simon no solo sobrevivió, sino que se reinventó, convirtiéndose en uno de los cantautores más innovadores y respetados de la música moderna.

Su estilo en solitario mezcló el folk-pop clásico con jazz, reggae, ritmos latinoamericanos y, sobre todo, música africana y brasileña. Su obra maestra Graceland (1986) fue un punto de inflexión: un puente entre la tradición occidental y los sonidos del mundo, que abrió puertas a la llamada world music.

Con su voz cálida, letras poéticas e ironía sutil, Simon creó canciones que hablaban de lo cotidiano, lo espiritual y lo político, siempre con un toque humano y cercano. Hoy, es considerado uno de los mejores letristas y compositores del siglo XX.


Mother and Child Reunion

Un tema pionero en incorporar reggae jamaicano al pop anglosajón. Su tono optimista y fresco lo consolidó como un artista capaz de ir mucho más allá del folk tradicional.


Me and Julio Down by the Schoolyard

Divertida, con ritmos latinos y letra juguetona. Representa la faceta más ligera y callejera de Simon, con un aire urbano que lo alejaba del tono serio de su pasado.


Still Crazy After All These Years

Una de sus baladas más reconocidas, con tintes de jazz suave y melancólico. La letra refleja madurez y vulnerabilidad, y le valió un Grammy a la Canción del Año.


You Can Call Me Al

Su éxito más divertido y global. Un tema con bajo legendario, ritmos africanos y un videoclip icónico junto a Chevy Chase. Es la cara más lúdica de Graceland, pero también un símbolo de su innovación.


Graceland

El corazón de su obra maestra. Una canción introspectiva y nostálgica que combina folk americano con ritmos africanos. Ganó el Grammy al Álbum del Año y se convirtió en puente cultural histórico.